¿Por qué puzzle empezar?

Acabas de llegar al mundo de los rompecabezas. Tal vez por convicción propia, como quien se apunta a un curso de defensa personal o de mindfullness. Entras en una tienda o en una web que has cazado al vuelo mediante el anzuelo de Google y te sorprende la oferta de puzzles tan pantagruélica que existe. Como si estás muerto de hambre y te metes directo a un bufet libre. Sin algo de cabeza, puedes salir con una indigestión y con la firme convicción de que no mezclarás la tarta de arándanos con la pizza cuatro estaciones.

Con los puzzles ocurre lo mismo. Antes de lanzarte como poseso a la primera caja que te haga tilín y en casa arrepentirte de que te quisiste poner al frente de un trasatlántico sin haberte sacado el título de patrón de lancha, lee estos diez consejos que te ayudarán a escoger bien tu primer puzzle.

1) Ten en cuenta la edad del puzzlero. No compraría puzzles mayores de 10 piezas para niños hasta 2 años, aumentaría a 20-50 hasta los 4 años, subiría a 100 hasta los 6, duplicaría a 200 a los 7 u 8 años, y a partir de los 9 años, instalaría el listón de las 500 piezas para todo tipo de personas y edades.

2) La imagen tiene que chiflarte. Esto que es obvio se topa con un baño de realidad cuando introducimos a otras personas en nuestro hobby, y a un vegetariano le regalamos un puzzle de la caja de bombones de Forrest Gump.

3) El puzzle tiene que ser fácil. Cuanto más puedas dividirlo en zonas clasificables y de no gran tamaño, más sencillo será el montaje. Cuanto más color exista, también.

4) No te fijes un tiempo máximo para acabarlo. Ya tendrás tiempo para competiciones en un futuro. Ahora tienes que aprender a gatear y a saborear cada pieza.

5) No te obsesiones por emplear técnicas que hayas leído en foros o vídeos de YouTube. Haz el puzzle como te parezca. Si quieres escarbar en la caja, adelante. Si quieres clasificar hasta el paroxismo, hazlo. Si quieres desparramar todas las piezas sobre la mesa hasta que todas estén vuelta arriba, ¡eso es!

6) Arma a la luz del día. Los colores y el contorno de cada pieza se revelarán en su estado natural. La noche confunde.

7) Cada pieza encajada es tu minitriunfo. Celébralo. Habla contigo mismo, con los que tengas alrededor. Sobre todo, no te levantes del puzzle si has enganchado una serie imparable de piezas colocadas.

8) Si te atascas, deja el puzzle para otro momento. Está comprobado que el descanso favorece el ataque más optimista de las superficies que el día anterior se revelaban imposibles.

9) Procúrate una mesa para ti solo. Como se trata de un puzzle de tamaño abarcable (un 500 mide 48x39 cm), puedes habilitar cualquier superficie horizontal durante un tiempo reducido sin provocar inconvenientes. No te recomiendo que tu primer puzzle lo armes en el suelo.

10) Acaba el puzzle. Da igual cuándo. Entonces reflexiona sobre tu experiencia. ¿Deseas repetir? Hazte con otro puzzle ligeramente diferente en estilo. ¿Te has quedado igual que antes? No pasa nada. Según el experto en desarrollo personal Anxo Pérez, cada año hay que aprender algo totalmente nuevo. ¡Tú has cubierto el cupo! Ahora bien, si lo dejas, no sabes lo que te pierdes...sé testarudo y fake it until you make it (finge que te gustan los puzzles hasta que te gusten).